viernes, 22 de febrero de 2008

DIARIO DE CAMPAÑA 1

Este blog es la versión actualizada de un diario personal que tiene bastantes años. Nació en una circunstancia en la que me embarcaba en una aventura social y pública. Quería entonces contar, desde una visión muy personal, los entresijos de mi vida municipal y política en esta estrecha ciudad. Después, diversas circunstancias me separaron de esa senda, hasta el punto de que las referencias han sido y son tardías y como a trasmano. Empieza hoy el principio del fin de un período agitado y turbulento que dura ya cuatro años, pero que en estos días que siguen actualiza la liturgia de la democracia: eso que llamamos período electoral. Me propongo dar algunas notas de mi visión de estos días. Tan particulares y subjetivas como las mías. Al fin y al cabo soy yo el que miro y remiro desde mi terraza. No estoy seguro de que aguante todas las fechas, porque otros asuntos me ocupan más sin duda, pero lo intentaré. Veremos.
DÍA 1
Se levanta el telón de un escenario que ya llevaba tiempo al descubierto. La pegada de carteles se ha transformado en nada pues hoy los carteles se pegan en las ondas y en las imágenes de los medios de comunicación. En buena lógica, toda la campaña electoral sobra. ¿Qué puede haber de nuevo que no lo hayamos todos descubierto? Tal vez en otro tiempo estos días supusieran el amontonamiento de ideas y de proyectos, la elevación a esquema de lo que fueran sueltas y asiladas ocurrencias. Tampoco es menos cierto que hasta ahora se tendría que haber estado defendiendo o alterando un orden de gobierno mientras que en estos días habría llegado el tiempo de las nuevas propuestas. Qué va, todo mentira. ¿Quién se va a sacar más conejos de la chistera? Si alguno lo hiciera en demasía caerían en el ridículo. ¿Es que no conocemos bien cómo respira cada uno? Alguno viene actuando de lobo todo el tiempo y ahora parece querer disfrazarse con piel de cordero. Que se la den a otro, a mí que no me engañen. Porque o antes eran falsos, o lo son ahora , o lo son en ambos casos. La única variable que no se puede considerar es la de ambas verdaderas. Los medios de comunicación son tantos, la res publica está tanto entre los pucheros, que nadie debería dejar apabullarse a estas alturas del partido. Y sin embargo vamos a ello, vistámonos de acólitos y que empiece la liturgia.
Se examina el Gobierno, con su balance al hombro; se examina la oposición, con su actitud en ristre. La vida son propuestas pero también actitudes ante esa vida, forma de encarar tanto las soluciones como los fracasos, tan inherentes y propios de la vida.
Porque lo que hoy empieza tiene un final muy próximo. Y unos ganarán y otros perderán en la suma y recuento de los votos. Tendría que ser tan solo en eso. Porque la vida sigue, y en ella todos juntos, los que sacaron más, los que menos sacaron, los que tengan que irse y los que tengan que quedarse. Qué más da, es tan poca cosa. Salvo que la vida se nos vaya en eso tan sencillo de ganar o perder. Entonces –desgraciadamente, porque qué nivel tan pobre sería ese- deberíamos someternos a la vergüenza pública del derrotado con el sambenito en la cabeza. ¿Y para qué? Para nada.
Primer día de campaña, las lanzas en el aire. Bullicio. Se rueda.

3 comentarios:

Er Schú dijo...

Llevo unos dias sin leer tu pg. Pero bueno hoy la he leido y me has recordado que por ahi andais ya metidos en plena campania electoral, pues ando por el norte de europa y no me traje los sobres para votar por correo, pero bueno, poco se pierde porque mi voto andaluz vale la veinteis ava parte de un voto de un kale borroca.Creo que hasta que por lo menos no valga lo mismo, no me animare a votar. A ver si arreglais eso los politicos profesionales. Enga chaval. A ve si escribes poemas que me gustan mas que tu prosa y fotos guays. Abrazos y disculpas por este teclado aleman sin acentos z todo cambiado.

Luis Felipe Comendador dijo...

Siempre me pregunté dónde están los ciudadanos profesionales... y a mí sí me gusta tu prosa, Antonio... mucho.

Mejórate, pimpollo.

Besines.

Sinda dijo...

Hazle caso a er schú en lo de la poesía, pero sigue con tu prosa de plus en plus profunda y sosegada.
Justo hace un par de días le dije a alguien que escribías cada vez mejor.
Un beso