viernes, 14 de marzo de 2008

MI PROPIA SOMBRA

No hay nada que persiga tanto al ser humano como su propia sombra. Hasta el punto de que su certeza se confirma en sus límites, en sus extensiones y en sus encogimientos. El sol nos ilumina, nos deja más al descubierto, nos señala con sus rayos, nos desnuda y nos deja a la intemperie, al amparo de su luz y de sus caprichos. En las estaciones luminosas somos un poco más nosotros mismos, nuestras figuras se alargan y se proyectan sobre el suelo, como en un escorzo en contraluz. Y así la luz me sigue y me persigue, no puedo desembarazarme de ella, desordena mi ser y mi figura, no puedo ir detrás de ella ni puedo perseguirla, es un ser que va ahí, que me resguarda, que me hace doble, que me agita, que es como mi otro yo. En esos vespertinos contraluces, me mira y me remira, se me queda mirando todo el tiempo, algo así como desafiándome, se burla, se sonríe, se calla y da la vuelta, y siempre a ras de tierra. Es algo inaccesible para mí, es compañera muda, invitada de piedra, siempre oscura, espejo casi cóncavo, figura de las de juegos chinos. Siempre parte de mí, buscando un doble desde mis pies confusos y asustados, escudriñados siempre por sus ojos. Cada vez que la miro, me vuelve una figura que me seduce siempre. No conozco mejor metáfora ni más sencilla imagen de mí mismo que esa sombra de Dios que me acompaña. Accede hasta mí mismo desde los mismos pies, pero si un día la llamo siempre escapa hacia el suelo, me rehúye, no quiere saber nada con mi cuerpo, no sé cómo se lleva con mis manos, solo sé que se burla de mis dedos. Resulta inaccesible a mis deseos, nunca puedo alcanzarla, y mira que lo intento cada día. Le digo que se pare y no me escucha, me detengo y se para, y, si me doy la vuelta, allí está permanente y cachazuda. A veces se me estira como huyendo de mí y a veces se me acerca para seguir su burla permanente. Quiero saber qué piensa de mí mismo y siempre queda muda. No sé nada de ella, a pesar de contar con su presencia siempre que me ilumina la luz cada mañana. Qué impúdica es la tía, siempre haciéndome burla, repitiendo mis torpes gestos. Es hija de la luz y eso que es sombra, se esconde cuando llega un día gris, cuando los cielos me ponen por montera un cúmulo de nubes, y, al fin, cuando la noche se marcha de paseo, se diluye en la nada, vuelve como asustada hasta mi cuerpo, que la acoge y la encierra, no sé cómo ni dónde. Solo la oscuridad puede borrarla.
Hay cosas que me siguen, que siempre van conmigo, y ni siquiera sé de qué manera tengo que saludarlas. Qué falta de cordura, qué estropicio, qué incomunicación, qué dos imbéciles mi sombra y mi razón. Voy a salir al sol a estirar piernas, a alargarme y medirme, a contemplar mi sombra y mi ceguera antes de que sea tarde y se apague también la sombra, se me niegue el espacio y el tiempo se me borre.

16 comentarios:

Jesús Majada dijo...

Tus palabras me han traído de inmediato el poema, tan malagueño, que Altolaguirre dedicó a Lorca:

"Las barcas de dos en dos,
como sandalias del viento
puestas a secar al sol.

Yo y mi sombra, ángulo recto.
Yo y mi sombra, libro abierto.

Sobre la arena tendido
como despojo del mar
se encuentra un niño dormido.

Yo y mi sombra, ángulo recto.
Yo y mi sombra, libro abierto.

Y más allá, pescadores
tirando de las maromas
amarillas y salobres.

Yo y mi sombra, ángulo recto.
Yo y mi sombra, libro abierto."

Er Schú dijo...

Hombre, pues…a ver: Se me amontonan las ideas. Yo no sé si Manuel Altolaguirre fue un linotipista y editor que se metió a poeta o un poeta que se metió a impresor y editor. Oye, que no tengo nada contra los impresores y editores, que nosotros dos mismos, ya sabes lo que fuimos: encuadernadores de cosido por inyección modelo patentado, y además hasta me parecen oficios dignos. De todas las maneras, ese conato de poema, cuatro haikús -cuéntalos-, no dejan de ser cuatro ocurrencias plásticas con atisbos de imágenes poéticas. Claro que como toda obra de arte, la conclusión de la obra la realiza el receptor. Yo, desde luego, valoro la obra literaria según el número de clases en las que podría estar liado con ella. La de Altolaguirre no me da para más de diez minutos, y con la página de Antonio podría estar medio curso. ¡Menudo paginón! Decía Sinda que se iba superando el chico. No, no. Montañero, lo que se dice montañero, de medio pelaje, poco más que El Calvitero y a lo sumo La Hoya-Moros, pero poeta… consagradísimo. Es todo un alarde de prosa poética. Muy bien Antoñiyo. Sigue deleitándome, y además si me sale lo de Enseñar el próximo año Literatura Española en California, estás tú antes que Altolaguirre, por supuesto.
Jesú, que.... otra cosa, que ya sabes que a tener hijos y nietos voy ganándote, pero a crítica Literaria siempre te he considerado una “auctoritas”. Abrazos

Luis Felipe Comendador dijo...

ENCARGO

Id, canciones mías, al solitario y al insatisfecho,
id también al desquiciado, al esclavo de las convenciones,
llevadles mi desprecio hacia sus opresores.
Id como una ola gigante de agua fría,
llevad mi desprecio por los opresores.

Hablad contra la opresión inconsciente,
hablad contra la tiranía de los que no tienen imaginación,
hablad contra las ataduras,
id a la burguesa que se está muriendo de tedio,
id a las mujeres de los barrios residenciales,
id a las repugnantemente casadas,
id a aquellas cuyo fracaso está oculto,
id a las emparejadas sin fortuna,
id a la esposa comprada,
id a la mujer comprometida.

Id a los que tienen una lujuria exquisita,
id a aquellos cuyos deseos exquisitos son frustrados,
id como una plaga contra el aburrimiento del mundo;
id con vuestro filo contra esto,
reforzad los sutiles cordones,
traed confianza a las algas y tentáculos del alma.

Id de manera amistosa,
id con palabras sinceras.
Ansiad el hallazgo de males nuevos y de un nuevo bien,
oponeos a todas las formas de opresión.
Id a quienes la mediana edad ha engordado,
a los que han perdido el interés.

Id a los adolescentes a quienes les asfixia la familia...
¡Oh, qué asqueroso resulta
ver tres generaciones reunidas bajo un mismo techo!
Es como un árbol viejo con retoños
y con algunas ramas podridas y cayéndose.

Salid y desafiad la opinión,
id contra este cautiverio vegetal de la sangre.
Id contra todas las clases de manos muertas.

EZRA POUND

Y que alguno termine dándose por aludido.

Besos, Antoñito.

Er Schú dijo...

Cuando yo era violinista, bueno, perdón, sólo era estudiante de octavo curso de violín en el conservatorio, estaba preparando el examen final de carrera con el Concierto para violín y orquesta en mi menor de Mendelshon, pero tenía un profesor particular al que le pagaba cinco mil pesetolas por clase, que por cierto era Soviético, y se llama Millan Bencovich. Me vino un día con una partitura de Ezra Pound qué él la había tocado en concierto en Francia, porque en Praga estaba vetado durante el tiempo de la URSS. La leí pero no me gustó mucho a la vez que le encontré la técnica un poco endiablada. Dobles cuerdas, arpegios como los de la segunda partita de Bach creo recordar, porque la verdad, hace tanto tiempo… No obstante se la llevé al profe oficial, y le rechazó al segundo diciéndome que ese autor aparte de ser un fascista no era buen compositor por lo que no contribuiría a subirme la nota. Total que no le di más importancia. También me ilustró de que no era mal poeta y nunca mostré más interés por su obra. Por cierto, ¿quién eres, Luis Felipe Comendador, que no he tenido el gusto de conocerte? Y eso que dices al final del poema ¿a quién te refieres?, a Jesús Majada o a mí, porque no puedo entender nada. Espera que voy a releerlo.

A ver:

¡Oh, qué asqueroso resulta
ver tres generaciones reunidas bajo un mismo techo!
Es como un árbol viejo con retoños
y con algunas ramas podridas y cayéndose.

Como no sea esto, que es por lo que me puedo yo dar por aludido, y Jesús Majada, lo mismo. Pues claro que le gano a nietos, leche, que yo tengo cuatro y él tiene dos. Y pa que veas que no chocheo, he de reconocer que pa guapos los chavales de David y Miriam que son rubios y con ojos azules y sobre todo Pablo es lo más simpático, y sin embargo los míos, los pobrecines, son más bien nietos de moro tirando a negro pero también son guapines, eh, aunque -a cada cual lo suyo-, no tanto. Antonio, a ver si le dices a Miguel Ángel que se anime, verás que chulada cuando te llamen abuelo. A mi, uno me llama unas veces Opa y otras veces Daddy. Vaya un lío con el poliglotismo.

Pues que le den por saco al fascista compositor ese que no conoció las delicias de los nietos. Yo, ¿qué quieres que te diga? Desde luego en mi antología no figura todavía ni un solo verso de ese admirador del Duce.

Ah, y Millan Bencovich todavía es violista de la filarmónica. Abrazos.

Antonio Gutiérrez Turrión dijo...

Sois todos mis amigos. Todos. Luis Felipe Comendador, además, es familiar mío, es editor, poeta y novelista. Un gran creador y un gran tipo. Haya paz y buen rollete entre todos. Por lo demás, cada uno interpretará lo que tenga que interpretar. Alzo mi copa y brindo mentalmente por todos. Y para todos, todos, un abrazo.

Er Schú dijo...

La jodimos, tía Manuela, pues vaya metedura de pata la mía. Mil perdones. Así que, ¡editor y poeta! Ahora ya casa todo. No sé pa qué coños se le ocurrió a Altolaguirre meterse a editor y a linotipista, leche. Pues a ver si los que os-nos divertimos-is aquí, ponéis lo primero la biografía. ¿No será el marido de la hermana pequeña de Nena? Pero si yo la conocí siempre una niña preciosa y soltera desde que su padre me regaló los cuadros que con tanto esmero conservo y admiro. Oye, que mil perdones, que ni puta idea, y que cuando vengas por aquí, Luis Felipe, estás desde ahora a mi mansión invitado. Verás qué risas y qué copas... Eso me pasa por divertirme demasiado. Antoñiyo, dile que tú muy bien me conoces y que todo eso…A partir de hoy me voy a dedicar a cosas más prosaicas pues resulta que en el atestado del atropello de mi hermana que todavía está totalmente inválida, la policía falseó los datos. Así que ahora a luchar contra Goliat en los Juzgados..Y otra cosa, Sinda, corrige esos acentos que faltan, que tú tienes ojos de “cuentahílos”. Abrazos

Er Schú dijo...

Cagüendiez, que no aprendo, que seguro que con lo de “cuentahílos” he vuelto a meter la pata. Por si acaso, mil perdones. Más abrazos. Hasta dentro de un mes no doy más la lata.

Er Schú dijo...

¿No será este el que os hizo la pascua a toda la familia, haciéndoos ir La Roda de Andalucía?

Er Schú dijo...

Borra, borra,que a este paso me coge manía, que no lea esto y que venga pronto a la costa, pa divertirnos... Ahora ya lo prometo. En serio que cierro. Adiós

Luis Felipe Comendador dijo...

Jajajajajajaja

Lo de La Roda es de puta madre, erchú. Ahí has bordado con hilillo de oro.

Luego te hago una entrada especial/espacial, que ahora ando con prisa

Luis Felipe Comendador dijo...

Nada, erchú, que te relato de resbalón cómo beligeré:
Ya me llamó la atención tu comentario con monjita y ancianito mecagoendiosano, y más no ver una contestación turriona potente [aunque la hubo]... luego lo de los inmigrantes [ahí me diste de lleno, que yo me dedico a ello en mis raros ratos libres y me cuesta mis disgustos y mis dineros y mis muchos cabreítos] y nada menos que con el apoyo misacantano del otro Antonio [supongo que el Merino]... y más tarde una cosita de corte nacionalsocialista... y luego algún comentario preelectoral y tal y tal... y rematamos con la fobita Altolaguirre [no hablo ya de esos viajes por la fría Europa, que hacían escenario como para callarse]
Así que, como te digo, decidí beligerar y ponerme de mi parte [porque soy de los míos, no te parezca mal] y me tiré al ruedo de las palabras, que me van las batallas campales y las de sin campar.

Me dije [y perdona], ¡coño!, un facha en el blog de mi cuñao y el jodío no responde... y yo, que tengo entre los güevos y las fístulas bien metidito el síndrome angelgarcía del espíritu de la tribu, pues que salí en defensita de mi cuñao, que es como si fuera yo por bonito y por mayor.

Ahora bien, cuando leí lo de La Roda de Andalucía hasta me caíste de puta madre... vamos, que ando pensándome marchar con toda la familia [cinco blancos y dos negros] a pasar la semanasanta en tu maison/mansión [somos de poco comer].

Y que nada, que pelillos a la mar, que te daré caña cuando me parezca y que la aceptaré cuando me la apliques como un poenema [puedo devolverte reptasílabos].

Ah, y yo sí había oído hablar de ti a mi mujer [la niña guapísima] y a mis cuñadetes/as.

Besos y brindis o vino y brossas

antonio dijo...

Vale, Luis Felipe. Había decidido callar y quitar importancia a tus comentarios, que me parecieron fuera de tono, porque conozco tu forma impulsiva cuando tratas de defender tus ideas. Pero, como vuelves a insistir, quiero aclararte el sentido de mis palabras. Tranquilo, que ni he pretendido quitarte méritos (he admirado siempre mucho lo que haces) ni atribuirme ninguno yo, que ni siquiera había oido hablar, con anterioridad a conocerle, de la existencia de este muchacho. Tuya sea la paternidad, como no, y tuya la satisfacción de lo conseguido. El sentido de mis palabras, sin embargo, no era metafórico. Es que el amor, el destino o lo que sea, parece que ha enganchado a dos corazones con uno de los cuales tengo lazos de sangre. ¿Tengo, acaso, que pedir perdón por ello?. A pesar de que respeto muchísimo a la tuya, yo tengo ya mi familia, de la que siempre me he sentido orgullosísimo. Espero que ahora comprendas mejor mis palabras. Abrazos.

Luis Felipe Comendador dijo...

as mayor, Antonio Merino, je, je...
Hay que encajar con alegría y no ponerse tan serio, coño.
Yo meto caña para que haya jaleo, que sé que a mi Antoñito GT [es como un coche, ¿eh?] le va la marcha flamenca aunque ponga cara de lo contrario... y a mí, no te cuento.

Mis méritos, si los hay, son también los tuyos... solo que a la edad hay que darle azuquita y pimienta para entrar a los trapos con gracia. No hay mal rollo, no, amigo... lo que hay es ganas de entrar en conversación guerrillera, que el asunto está más que aburrido.

Un besote para tu santa, mil para tus criaturas chulas y un abrazo con zancadilla para ti, tío serio.

Ah!, y otro abrazo para el erchú, que no se nos ponga celosote.

NOTA: Me gustaría que en esta guerra galáctica pusiera también bombas Sinda, que me ha dicho un pajarito que para eso es genial.

También besos para la moza.

RENOTA: Parecéis una pandilla de prejubilaos.

Hala.

antonio dijo...

Ya me parió serio mi madre y más seriedad me endilgaron después quienes me educaron. Así, no puede sobrarme la gracia, y bien que lo siento.

Ya sé que te gusta zurrar y sé, también, que lo haces siempre con la mano tendida. No tendré nunca inconveniente en estrechar esa mano. No me pidas gracia, que no la tengo. Para eso habría que tener tu sentido del humor y tu dominio de la escritura, de los que estoy muy lejos. Además, si es que las entradas de Antonio GT son la leche y te dejan sumido en la más pura nadería.

Pues nada, hombre, que yo también te aprecio y también te abrazo; pero ¿ves? yo no sabría ponerte la zancadilla al mismo tiempo.

¡Ah! y de viejo nada: ¿qué son sesenta primaveras, cuando están bien floridas? Como decíamos cuando chicos: ¡te echo una carrera!. Salud, amigo.

Sinda dijo...

Lo de pandilla de prejubilaos, espero que no vaya por mí, que yo y mi sombra hemos estado bien calladitas esperando a ver. Pero si hay que entrar se entra.
Supongo que os habréis percatado de cómo se alarga la sombra de Antonio G.T. Mucho más que la del ciprés de Delibes. Ya van 15 comentarios, y alguno hasta con algo de mala sombra, como dicen muy bien mis compatriotas andaluces. Primero fue la sombra de Antonio, luego la de Altolaguirre, el poeta-impresor-editor-amigo de sus amigos. Más tarde er Schu que empezó a liar la madeja, y tirando del hilo aquí estamos.

Antonio Merino, yo también digo que estuviste seriote en tu primer comentario. Y gracia alguna tienes, que yo te la he visto.

Luis Felipe, menudo pajarraco el que te ha dicho que soy tan guerrillera, él sí que debería haber puesto alguna bomba por el camino verde. Yo, la verdad es que en más de una ocasión me he quedado con las ganas. Pero los viejos recuerdos –que son como los viejos roqueros-me han podido.
Intelligenti pauca (como diría AGT).
Por cierto, te sigo a diario en tu blog desde el día que supe de él. y hasta creo conocer un poquito a Donce y a otros cuantos.
Muchas veces he pensado entrar, pero eso son palabras mayores. Nunca sé qué decirte, me dejas “époustouflée”-como dicen mis amigos franchutes.
¿De dónde diablos sacas tiempo para hacer todo lo que haces, y además trabajar ?(quiero decir en trabajo remunerado.)
Decía Prévert que “Le temps -mène la vie dure -à ceux qui veulent le tuer". A ti, jodío , el Tiempo no te hará nunca eso, lo tienes bien de tu parte, y además te ha regalado al viejo F.
Pues eso,que buen rollo a todos, y que hay cosas para las que el teléfono o el correo electrónico son más apropiados que un blog.
Besotes para todos

Er Schú dijo...

http://www.titogarcia.com/wordpress/

Sinda, ahí tienes a tu ahijado tocando muchas obras maestras. La obra más deliciosa, para mi gusto el el "lLarghetto de Max Reger" que tanto éxito ha tenido en Bonn y en Bayreuth. No tengo tiempo de más. Adiós.