lunes, 31 de marzo de 2008

LA OTRA REALIDAD

¿Por qué tendrá que ser que las palabras nos confunden tantas veces? Ellas mismas son pobres, se acercan con cautela a la realidad, la representan solo en apariencia. Entre ellas y los sentimientos primeros siempre hay un descampado que nos lleva con demasiada frecuencia a la incomprensión y al desencuentro. Esos desencuentros se solucionarían si volviéramos más veces al reino de las primeras intenciones, al pálpito primero que empujó nuestras acciones. Cuando nos agarramos con uñas y dientes al tenor literal de las palabras, hay pocas soluciones y todo se nos vuelve incomprensión y malos modos. Y luego están las palabras de los otros, sus interpretaciones, que añaden confusión y ocultamiento. En esas circunstancias, buscar la solución no es nada fácil. Sé bien por qué lo digo.

1 comentario:

Sinda dijo...

Querido Antonio: Me siento en sim-patía contigo. Tus palabras de hoy están cargadas de contenido y de sentimiento, se acercan a la realidad -también a la mía- y creo que la representan. ¿Podrían dejarse a un lado las palabras y volver al reino de las primeras intenciones? Sea.
Un abrazo grande