lunes, 10 de marzo de 2008

DIARIO DE CAMPAÑA 17+1

EL DÍA DESPUÉS:
Leo análisis por todas partes, versiones apresuradas y hasta visiones de futuro basadas en los resultados del día de ayer. No sé con quién estoy de acuerdo ni con quién dejo de estarlo; ni siquiera sé si estoy de acuerdo conmigo mismo.
Creo que hay tres niveles que me interesan y que habrá que tener en cuenta para el futuro.Los tres ofrecen muchas variables y estas no caben en una entrada pretendidamente breve. Sigo con un sabor agridulce por los resultados si los considero en el nivel nacional. No entiendo cómo se puede refrendar en parte el tipo de oposición que ha ejercido el PP. Me parece que esto augura otra legislatura tensa y crispada, pues se van a sentir crecidos con los datos de su aumento, escaso, pero aumento. Sensu contrario, otros pensarán que han sido refrendadas las opciones socialistas y, si esto era poco menos que el fin del mundo, con ese reforzamiento, el apocalipsis será un juguete comparado con la realidad que nos espera. De modo que mal punto de partida. Habrá que lidiar con cuidado pues el toro anda muy resabiado y mira a la cara aviesamente. Estupendas las noticias para el PSOE en el País Vasco y, paradójicamente, no tanto en Cataluña, sobre todo si no se sabe administrar el resultado con humildad y con solidaridad para con el resto de España. Ruido sin nueces y agua de borrajas lo de UPyD; el tiempo lo diluirá todo y los medios de comunicación harán el resto, salvo los desvergonzados de El Mundo, que ya andan apuntándose tantos por si acaso. Lo de este periódico es de juzgado de guardia a diario. La portada de hoy mismo mostrando una pachanguera venganza contra Zapatero -siempre son enfrentamientos personales, que son los que dan más morbo- diciéndole algo así como esto: "Tú que nos has metido en el fango, te jodes y nos sacas ahora de él". Como si esto fuera una cosa de un iluminado cualquiera. Léase, discútase y quémese el periódico en pira pública. Y penosísimo lo de IU. A mí es lo que más me duele y lo que me parece más injusto. A ver si hay narices para cambiar la ley electoral por parte de los dos grandes partidos, que va a ser que no.
En el nivel provincial todo sigue igual. O eso parece. Pero es mentira. En Salamanca se ha producido un fenomeno que pone de relieve hasta qué punto es necesaria la renovación de las caras de los partidos. Emilio Melero lleva demasiados años al frente del partido en la provincia y los electores lo han borrado del Senado. No me gustaría estar estos días en su piel. Pero es este un nuevo caso en el que a la izquierda se le exige más que a la derecha. Los dos diputados elegidos del PP ni son de aquí, ni están ni se les espera. Y llevan ya varias legislaturas. Y nadie dice nada. Lo que vale para unos no sirve para otros. Los medios de comunicación se ensañarán con el caído y ni siquiera harán mención de lo que ocurre en su bando ideológico. Supongo que este hecho hará definitivamente saltar del cargo a Melero. A ver a cuánta gente más. Será curioso seguir las manifestaciones de algunos y de algunas.
Y en el nivel local, me apena que esta ciudad que tanto le debe al ministro Jesús Caldera no le haya votado en masa y hasta le haya dejado con un centenar de votos menos que los que le ha otorgado al PP. Supongo que será para él todo un disgustazo y un bajón de moral. Habrá razones para explicarlo pero a mí no se me alcanzan. Espero que, a pesar de todo, no ceje en el empeño con algunos proyectos importantes que hay pendientes de adjudicación y de ejecución.
En fin que esto está lleno de variables de todos los colores. Como corresponde a todo un proyecto electoral, fiesta y liturgia, suma de voluntades, crisol de voluntades, bebedizo de licores y pócima de sabores. A pesar de todo, ahí estamos, como ayer, como los días anteriores, como los días que nos aguardan.
A partir de hoy empieza lo más difícil y lo menos personalista. ¿Para qué se consiguen las victorias o se cosechan las derrotas? Eso tiene ya más miga y menos afectación personal. Ahí los quiero ver.

3 comentarios:

Jesús Majada dijo...

Creo que pintan bastos, y muy duros, para el PP. Después del baile de diputados de anoche, a medida que hoy pasan las horas me va pareciendo de más peso la victoria del PSOE, y más amarga la derrota de los populares. Esta misma mañana pensaba que la situación de Rajoy no iba a ser muy duradera, y a mediodía oía que se rumoreaba su salida de la direccón. Y no es para menos: dos elecciones perdidas y una legislatura por delante sin nadie al lado, pues se ha buscado la animadversión de todos los partidos parlamentarios (excepto tal vez Coalición Canaria). En cambio, Zapatero (si quitamos al PP) mantiene buenas relaciones y posibilidad de negociación con todos los grupos. Cuestión de talante.
Y el futuro que Rajoy ha diseñado para su partido me parece aún más negro: si se va, ¿quién le va a suceder?: ¿Aguirre? ¿Gallardón? Ambos están fuera del Parlamento…

mojadopapel dijo...

Estoy totalmente de acuerdo que habria que cambiar la Ley Electoral, e ir como en Francia a una segunda vuelta, pero quien le pone los cascabeles al gato?.

Er Schú dijo...

Pues me ha gustado la oración que le han cantado a los muertos del 11-M. Un buen detalle. Estética excelsa y profundo contenido.

Da pacem, Domine, in diebus nostris
Quia non est alius
Qui pugnet pro nobis
Nisi tu Deus noster.

Y el resto: “Vanitas vanitatis…”