jueves, 19 de agosto de 2010

VOY RECOGIENDO RESTOS DE ESTE HERMOSO NAUFRAGIO DEL VERANO

DE ESTE HERMOSO NAUFRAGIO DE VERANO

Voy recogiendo restos
de este hermoso naufragio del verano
en el que todo un mar de olas
va y viene sin descanso,
sin rumbo, sin sentido, sin retorno,
desde el inmenso mar
hasta la arena limpia de mis playas.

Llegan barcos cargados de ternura
amurando la proa
y dando luz sin tregua
a sotavento y barlovento.
Yo me siento en la cofa ,
observo al timonel
maniobrando sin tregua
para que las embarcaciones
amarren y recojan con cuidado las velas,
se tiendan en la playa confortables
y sientan que los mares
bien pueden aguardar
naufragios y tormentas:
estos son solo días en mis playas.

Pero sé que -es mi duelo-
las naves van de paso,
que levan anclas todas
con el viento de popa,
que salen mar adentro,
camino de otro sol y de otras playas
y yo me quedo solo
varado y sin resuello
en mis arenas blancas, solitarias
que suspiran por ver el horizonte
con otros barcos nuevos
que vengan a mis playas y a mis puertos.

Voy recogiendo restos
de este hermoso naufragio del verano.

1 comentario:

Sinda dijo...

Pero qué marinero te me has vuelto en tierra.
O acaso te inspiró el mar de mi Sanabria? O tal vez fue "El asedio"?

Como quiera que fuere, suelta tú también amarras, y ven desde esa tierra hasta estas playas y estos puertos, y verás que el poeta no está solo.