sábado, 29 de mayo de 2010

BEHIND DE MUSGO

He leído en varios sitios que la fiesta del Corpus, con sus hombres de musgo de acompañantes, ha sido declarada fiesta de interés turístico nacional. Espero ver la noticia con letras más grandes en las publicaciones locales y estoy seguro de que andará de boca en boca y se llenarán varios sacos con las alabanzas que reciba. Tal vez se atenúen por el hecho de que al mando de la alcaldía anda un representante socialista y cualquier consecución en estas condiciones hay que airearla con sordina. Pero la susodicha fiesta está a la vuelta de la esquina. Seguramente para ese día todo el mundo sacará pecho y empujará en la procesión con un poco más de fuerza.

Yo no. ¿Y eso? Veamos.

Me pregunto cuáles pueden ser las razones en que se apoyen las opiniones favorables a este reconocimiento. No las encuentro. Quiero decir que tengan algo de consistencia y que no representen un grado de fariseísmo que raye en el insulto.

Quiero recordar algo obvio: se trata de una fiesta religiosa: Corpus Christi. ¿Cómo puede ser declarada una fiesta religiosa de carácter nacional? ¿Pero no es la religión una práctica de obligación privada aunque se manifieste públicamente? ¿Qué es lo que se le ha añadido para que, esta sí y las demás no, haya conseguido este honor? Todo el mundo lo sabe: el asunto este del musgo, o sea, un motivo folclórico que alguien debería explicar qué posee de religioso. Yo no le encuentro ningún parecido.

Pero es que, además, ese elemento musgoso que se le añade -elemento decorativo de tipo natural de primavera, como puede suponer cualquier persona con sentido común- no tiene ninguna base de tipo histórico ni, lo que es más importante, de tipo lógico. O sea, que está basado sencillamente en mentiras. No poseemos ningún documento que acredite lo que se quiere que representen esos pobrecitos seres medio asfixiados por el musgo y sí en cambio los poseemos del autor que se inventó la leyenda, no hace más de un siglo.

Si, a pesar de ser todo mentira, se sigue apostando por ello, existirá alguna otra razón. ¿Cuál puede ser esta? La ignorancia, sin duda. Pero tiene que haber alguna más. ¿Qué tal si anotamos el intento, por cualquier método, incluido el de vestir a unos seres con el musgo, de que venga gente de fuera, llene nuestras calles y deje sus euros en los negocios de la ciudad? Me gustaría equivocarme pero me parece evidente. Si estuviera en lo cierto, ¿qué contubernio es el que conforman la iglesia y la sociedad civil para montar este espectáculo? Si estuviera o estuviese en lo cierto, ¿estaría en condiciones de pensar razonablemente que son unos fariseos y que hay que expulsarlos del templo a patadas y a latigazo limpio, empezando por los más místicos?

Y para rematar, ¿qué hace un alcalde socialista afirmando tradiciones que se basan en lo inexistente y que dan más fuerza, incluso con estos métodos tan mercantiles, elementos irracionales y de muy escaso valor educativo para la población, salvo el asunto ese de los euros dejados en los bares? ¿De verdad que esto es darle lustre a la ciudad?, ¿esto es educar a la población en el pensamiento y en la participación?

Sospecho que este no es un paso adelante sino varios hacia atrás. Y para eso no hace falta meter demasiada prisa a las obras de la Plaza Mayor precisamente cuando llevan semiparadas casi todo el año. ¿O es que acaso estamos de acuerdo con las sumisiones que se producen en esa procesión y con todo lo que eso significa? Hay que hacérselo mirar. Aunque parezca que con ello ganamos algunos euros. Supongo que esos serán euros que dejarán de gastarse en algún otro sitio. Y esos sitios también serán hijos de Dios. Digo yo.

Espero que no me cuelguen por ser tan políticamente incorrecto.

En fin, otra vez que nos situamos behind de musgo.

1 comentario:

PENELOPE-GELU dijo...

Buenas noches, profesor Gutiérrez Turrión:

Perdone que le diga, aunque tenga usted toda la razón, está hecho un tierno cascarrabias. Y me ha hecho reír, con lo del "behind" (lo repetiremos hasta aprenderlo, detrás, detrás, detrás...) y los hombres de musgo. Deje que pasen calor y gocen, ellos y todos los vecinos y visitantes.
Y al alcalde no le agobien. ¡Para una ocasión que hay de ver risueña a la ciudadanía en la calle, con lo que está cayendo!.
Y a los representantes de la iglesia, entiéndalos en todo lo que se refiere a dineros. Lo hacen por no dejar en feo a Jesús. ¿Cómo iban a explicar, si no, la violencia de los latigazos cuando expulsó a los mercaderes del templo?.
¡A disfrutar todo el mundo!. Eso sí, que el origen y la historia, se sepa.

Saludos. Gelu