viernes, 6 de junio de 2008

EL TIEMPO SE HA TOMADO SU VENGANZA



Se ha echado a andar ya junio. El verano ya acecha en las esquinas. Si no fuera por un aire fresquillo que cruza por las calles, todo sería ya carne al rojo vivo. Una vez más se cumple en estas tierras aquel viejo dicho de que se pasa del abrigo a la piscina, del frío al calor y del encogimiento al desparrame. Quien mejor canta la melodía del calor y del verano son las muchachas con sus vestimentas y con sus arrebatos exentos de pudor. Qué cambio de paisaje. Ahora mejor que nunca me cercioro de que ellas siempre tienen la misma edad mientras que yo me veo cada día más arrugado. Hasta una cierta edad, los profesores de ciertas materias tenían el privilegio de tener siempre colgada a alguna alumna que miraba arrobada y escuchaba palabras biensonantes. He dicho hasta cierta edad. Hoy solo quedan restos de aquellas horas plácidas, de contención y de alguna mirada furtiva, siempre tras el cuidado de la moral al uso. En tan solo unos días parece que sus cuerpos se transforman, que crecen a destajo, que sus cuerpos se exhiben tercamente, que el mundo les sonríe, que todo está a sus pies, que en cada calle se sienten unas reinas. Me basta la mirada, la sencilla mirada que se aquieta y se torna extasiada. El tiempo se ha tomado su venganza y yo ando ya entregado tal vez a otra manera más lenta de vivir.

“El cielo de Salamanca”. Puede valer como metáfora, como imagen o como comentario social. Me manda un nuevo libro Luis Felipe con este título. Gracias, colega, siempre. No es más que un nuevo ejemplo de un gasto que pagamos entre todos y que cumple el capricho de unos pocos. Parece que en Salamanca andan empeñados en seguir recordando aquello de la capitalidad cultural de hace diez años. Y con el mismo logo se montan una fiesta anual de la poesía. No es que esté mal la idea, es que, como en tantas ocasiones, se la montan a gloria de quien quieren. El libro que retiene su existencia, que guarda su memoria, es malo de cojones. Perdóname, Felipe, que te salvas, pero entre mucha mierda, incluida la aportación de Antonio Colinas. Qué decepción tan grande. Hay gente que concibe la poesía de forma tan distinta a como yo la veo, que no puedo tenerla entre mis manos sin soltar algún taco. En fin que aquí no se cumple aquello de “a caballo regalado…”. No se trata solo del libro sino de casi todos los autores y de la forma alegre con la que se juega a la subasta con el dinero público.

Y mañana a la sierra, a andar por los caminos, a ver cómo las mañanas las sostienen los pájaros, pues no serían sin ellos ni sus trinos, a contemplar los verdes y los blancos, todavía en lo alto de la sierra, a llenarme de fiel naturaleza. Hasta mañana.

2 comentarios:

mojadopapel dijo...

Me da envidia; que disfrutes de tus esperados paseos finsemanales y te llenes a tope de naturaleza, ya sabes que sienta muy bien

Jesús Majada dijo...

Querido Antonio:
Acabo de ver en internet un vídeo que me ha recordado tu entrada de hace días sobre las banderas vaticana y española ondeando en El Salvador. El espectáculo tiene lugar en un pleno municipal de Morón de la Frontera, en tierras de esta Andalucía, en el que se proclama a la Virgen “Alcaldesa honoraria de Morón”. Hay en el documental tres momentos cumbre: la votación (por mayoría, pues todos los concejales votaron a favor, salvo dos de IU) y declaración del alcalde: “María Auxiliadora, le pese a quien le pese, es alcaldesa de Morón desde este momento"; el segundo se produce cuando los concejales, puestos en pie, entonan un himno religioso; y el colofón llega con los mofas y el silbido a dos dedos que el alcalde-gañán dispensa a los concejales de IU que abandonan el pleno.
Para verlo y creerlo, en esta dirección: http://www.cadenaser.com/espana/video/burlas-alcalde-moron-frontera/csrcsrpor/20080606csrcsrnac_2/Ves
Imaginé que esto sucedía en Béjar (¿por qué no?)… y que los dos ediles disidentes erais Luis Felipe y tú. Esbocé un amago de sonrisa, pero enseguida me di cuenta de que era una broma demasiado amarga.
Un abrazo.