PARA MERECER TANTO
No se ofrecen los dones duraderos
a quien no se trabaja su apetencia
pues solo es positiva la querencia
si se mantienen vivos los anhelos.
Mientras tu cuerpo lucha desde dentro
para salir al mundo en su inocencia,
yo he de buscar consuelo en la apariencia
y sabor en la fuente de otros besos.
Apréstate a beber en tus entrañas
los regalos del libro de la vida
y sáciate de jugo y de esperanza.
Yo libaré también la lejanía
de tus brazos, que imploran de su dueño
el don de la derrota cuerpo a cuerpo.
martes, 15 de marzo de 2011
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1 comentario:
Buenas noches, profesor Gutiérrez Turrión:
Reciba mi calificación como lectora, a su poema: extraordinario.
Como maestro, le agradecería que se pasara por mi blog, y me corrigiera los fallos que observe.
Y si no, pues se lo diga a Casadiego, y él se encargará.
Saludos.
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